“¡Troya! La bien construida, la de altas murallas… ¡Cuánta tristeza ha derramado la guerra sobre tan bella ciudad! Los libros de historia exaltan las hazañas de los ejércitos vencedores; este relato, en cambio, nos revela la desolación de quienes quedaron tras la derrota. Aquí resuenan las voces de las mujeres troyanas tras el silencio de las armas: la desolación que deja la guerra y el sufrimiento inevitable de la derrota. Es Hécuba, reina de la ciudad caída, quien teje el hilo de la historia, siempre acompañada por el coro de voces femeninas, así como por la incesante intromisión de los dioses y, en esta ocasión, por el eco doliente de los caídos».
Las troyanas, la Obra de Teatro gimnasiana que el 18 de octubre que nos reunió en una tarde conmovedora, en la que los alumnos de séptimo y octavo se apropiaron del escenario.